Banderas

Estoy hasta la polla de escuchar o leer mentiras acerca de la bandera rojigualda.

De acuerdo que es la bandera constitucional, la oficial, la que todo el mundo considera como la bandera de España.

Pero no es más que eso.

No nos representa a todos, no mintáis. Representa solamente a quien se quiera sentir representado, exáctamente igual que cualquier símbolo. 

A ver si lo pilláis, no estamos hablando de leyes, ni de hechos objetivos. Son sentimientos. No se puede obligar a nadie a sentirse de una manera determinada. Por lo tanto, no se puede obligar a nadie a sentirse representado por una bandera.

Por ejemplo, hay gente que no se considera española, aunque viva dentro del Estado Español. Y podréis estar de acuerdo con ellos o no, podrán tener razón o no tenerla, podrán ser estúpidos o muy listos, pero lo que es innegable es que esa bandera no les representa.

Otro caso es los que, considerándose españoles, no son monárquicos, e, igualmente respetable, quisieran que en vez de dos colores, hubiera tres en la enseña nacional.

Y luego, por supuesto, está mi caso. Yo veo esta bandera, o cualquier otra, y lo que estoy viendo es un puto trapo con pretensiones, un instrumento que utiliza según quien para engañar, o para desviar atenciones.

O sea que a mi no me metáis en vuestras mierdas, porque a mi no me representa la bandera. Ni esta ni ninguna. Exáctamente igual que no representa a mucha gente que conozco.

Y no me habléis de respeto. Respetad vosotros. Igual tenéis que empezar por respetar la libertad de expresión, eso que pone en la sacrosanta constitución que tanto veneráis. En vez de sentiros ofendidos con cada chorrada que aparece en la tele, siempre podeis cambiar de canal, o hacer lo que hago yo cada vez más a menudo: apagarla.